Una mujer se acercó a toda prisa al violinista Fritz Kreisler después de un concierto y le dijo efusivamente:
"Oh, ¡yo daría la vida por tocar como usted!"
Él le contestó serenamente:
"Eso es exactamente lo que hice yo"
Hay metas en la vida que nos demandan determinados sacrificios. Los que consideran esas metas importantes se abstienen de muchas cosas para poder lograrlo.
No es fácil sin dudas... por eso la pregunta es ¿vale la pena?
Si tu respuesta es sí, ¿lo estás intentando? ¿Te estás esforzando?
Para pensar...
viernes, 11 de noviembre de 2011
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viernes, 11 de noviembre de 2011
Una mujer se acercó a toda prisa al violinista Fritz Kreisler después de un concierto y le dijo efusivamente:
"Oh, ¡yo daría la vida por tocar como usted!"
Él le contestó serenamente:
"Eso es exactamente lo que hice yo"
Hay metas en la vida que nos demandan determinados sacrificios. Los que consideran esas metas importantes se abstienen de muchas cosas para poder lograrlo.
No es fácil sin dudas... por eso la pregunta es ¿vale la pena?
Si tu respuesta es sí, ¿lo estás intentando? ¿Te estás esforzando?
Para pensar...
"Oh, ¡yo daría la vida por tocar como usted!"
Él le contestó serenamente:
"Eso es exactamente lo que hice yo"
Hay metas en la vida que nos demandan determinados sacrificios. Los que consideran esas metas importantes se abstienen de muchas cosas para poder lograrlo.
No es fácil sin dudas... por eso la pregunta es ¿vale la pena?
Si tu respuesta es sí, ¿lo estás intentando? ¿Te estás esforzando?
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