martes, 16 de diciembre de 2008

NO hay excusas para una buena cena

Acá van algunas recetitas para la Noche Buena, a ver si nos animamos y después me cuentan.

Entrada: BUDÍN DE ATÚN
Ingredientes para 4-6 personas
2 latas pequeñas de atún en aceite
4 huevos enteros
1/2 taza de pimientos
1 taza de leche evaporada
1/2 cucharadita de sal.
Preparación de la receta de budín de atún
Triturar todo bien en la batidora.Verter todo en un molde untado con aceite o mejor con mantequilla.
Meter en el horno 25 minutos a temperatura media.Se desmolda y cuando este frío se unta con mayonesa

Plato PRINCIPAL: POLLO A LA PROVENZAL
Ingredientes
1 Pollo 1 cebolla chica 2 cucharadas de manteca 2 cucharadas de aceite
1 taza de ajo y perejil picados salvia y romero sal y pimienta
Preparación
Cortar la cebolla en aros y rehogarla en el aceite.
Trozar el pollo en presitas chicas.
Dorar el pollo espolvoreado con sal, pimienta, salvia y romero. "Acomodar" encima la manteca en pedacitos.
Cuando está dorado por fuera, agregar 1/2 taza de agua caliente (bien caliente). Tapar y bajar el fuego. Dejar cocinar (aprox. 10 minutos), destapar y dejar que se consuma el agua (otros 10 minutos), girando las presitas (para que se cocine parejo). Cuando se consume el agua, apagar el fuego y agregar el ajo y el perejil. (No agregar con el fuego prendido porque el ajo se quema y le queda gusto amargo). Tambien se puede hacer con el pollo entero.
Esto queda muy bien con Papas a la Manteca....

Postre: Esto va sin receta.
Helado de Granizado, Chocolate con almendras, Banana Spilt, Frutilla, colocados sobre una generosa porción de Brownie o de un bizcochuelo de coco.



Glotones: se puede Repetir.



.



Un poco de historia "3"

Continuando con mis recuerdos. La cena de Noche Buena era la mejor del año! Casi siempre mi mamá preparaba salpicón de ave o un pollo al horno o asado. Pensándolo bien, no eran extraordinarias las recetas, pero para nosotros eran especiales. No teníamos arbolito de Navidad, creo que hasta los ocho o nueve años no lo podíamos comprar, una tarde juagando con mis amigas habían tirado al los contenedores de basura un arbolito, se imaginarán a donde fue a parar... ¡Sí me lo llevé a mi casa! Era de esos duros, con base cuadrada y el tronco encastrado en una especie de barro o cemento, ahora que lo pienso bien, era un asco!! Ja , mi mamá me sacó corriendo y yo intentando salvarlo del tacho, no tuve suerte y termino en el contenedor de nuevo, ¿por qué habrá sido ninguna mamá quiso quedárselo en su casa? Ja. Claro nosotros crecíamos y queríamos ese árbol que casi todos tenían. Mi vecino, de la puerta de enfrente tenía uno enorme que llegaba hasta el techo, ocupaba gran parte del comedor, estaba lleno de luces con forma de velitas y cantidad de adornitos, era la visita obligada de los chicos del edificio. Hasta que un año , mi tío, que parecía nuestro hermano mayor, se trajo un arbolito blanco y algunos adornos. ¡Qué felicidad! era toda un experiencia religiosa jajaj. Lo adornamos rapidamente y por supuesto se corrió la bolilla entre mis amiguitas que venían corriendo a ver la novedad en mi casa. Creo que todos podemos escribir libros enteros contando parte de nuestras historias. La cosa es que terminaa la cena y todos los chicos nos encontrábamos "abajo" en una gran patio, donde se formaría el bailongo. Allí esperábamos jugando y bailando que se hicieran las doce menos tres minutos para ir de nuevo a casa y brindar con la mejor sidra que pudiéramos comprar. Y así ocurría, corríamos, subíamos las escaleras y estábamos listos para la sidra, el pan dulce, las nueces, los turrones reduros que te partían los dientes! Y... si se podía algún regalito aparecía debajo del arbolito. Hoy a la distancia y desde la óptica de mis viejos, pienso, cada vez que miraba a mi hija ver el reloj para que sean las doce y abrir su regalo, ellos me mirarían a mí, la cara de felicidad por un simple arbolito y un humilde regalito.

martes, 16 de diciembre de 2008

NO hay excusas para una buena cena

Acá van algunas recetitas para la Noche Buena, a ver si nos animamos y después me cuentan.

Entrada: BUDÍN DE ATÚN
Ingredientes para 4-6 personas
2 latas pequeñas de atún en aceite
4 huevos enteros
1/2 taza de pimientos
1 taza de leche evaporada
1/2 cucharadita de sal.
Preparación de la receta de budín de atún
Triturar todo bien en la batidora.Verter todo en un molde untado con aceite o mejor con mantequilla.
Meter en el horno 25 minutos a temperatura media.Se desmolda y cuando este frío se unta con mayonesa

Plato PRINCIPAL: POLLO A LA PROVENZAL
Ingredientes
1 Pollo 1 cebolla chica 2 cucharadas de manteca 2 cucharadas de aceite
1 taza de ajo y perejil picados salvia y romero sal y pimienta
Preparación
Cortar la cebolla en aros y rehogarla en el aceite.
Trozar el pollo en presitas chicas.
Dorar el pollo espolvoreado con sal, pimienta, salvia y romero. "Acomodar" encima la manteca en pedacitos.
Cuando está dorado por fuera, agregar 1/2 taza de agua caliente (bien caliente). Tapar y bajar el fuego. Dejar cocinar (aprox. 10 minutos), destapar y dejar que se consuma el agua (otros 10 minutos), girando las presitas (para que se cocine parejo). Cuando se consume el agua, apagar el fuego y agregar el ajo y el perejil. (No agregar con el fuego prendido porque el ajo se quema y le queda gusto amargo). Tambien se puede hacer con el pollo entero.
Esto queda muy bien con Papas a la Manteca....

Postre: Esto va sin receta.
Helado de Granizado, Chocolate con almendras, Banana Spilt, Frutilla, colocados sobre una generosa porción de Brownie o de un bizcochuelo de coco.



Glotones: se puede Repetir.



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Un poco de historia "3"

Continuando con mis recuerdos. La cena de Noche Buena era la mejor del año! Casi siempre mi mamá preparaba salpicón de ave o un pollo al horno o asado. Pensándolo bien, no eran extraordinarias las recetas, pero para nosotros eran especiales. No teníamos arbolito de Navidad, creo que hasta los ocho o nueve años no lo podíamos comprar, una tarde juagando con mis amigas habían tirado al los contenedores de basura un arbolito, se imaginarán a donde fue a parar... ¡Sí me lo llevé a mi casa! Era de esos duros, con base cuadrada y el tronco encastrado en una especie de barro o cemento, ahora que lo pienso bien, era un asco!! Ja , mi mamá me sacó corriendo y yo intentando salvarlo del tacho, no tuve suerte y termino en el contenedor de nuevo, ¿por qué habrá sido ninguna mamá quiso quedárselo en su casa? Ja. Claro nosotros crecíamos y queríamos ese árbol que casi todos tenían. Mi vecino, de la puerta de enfrente tenía uno enorme que llegaba hasta el techo, ocupaba gran parte del comedor, estaba lleno de luces con forma de velitas y cantidad de adornitos, era la visita obligada de los chicos del edificio. Hasta que un año , mi tío, que parecía nuestro hermano mayor, se trajo un arbolito blanco y algunos adornos. ¡Qué felicidad! era toda un experiencia religiosa jajaj. Lo adornamos rapidamente y por supuesto se corrió la bolilla entre mis amiguitas que venían corriendo a ver la novedad en mi casa. Creo que todos podemos escribir libros enteros contando parte de nuestras historias. La cosa es que terminaa la cena y todos los chicos nos encontrábamos "abajo" en una gran patio, donde se formaría el bailongo. Allí esperábamos jugando y bailando que se hicieran las doce menos tres minutos para ir de nuevo a casa y brindar con la mejor sidra que pudiéramos comprar. Y así ocurría, corríamos, subíamos las escaleras y estábamos listos para la sidra, el pan dulce, las nueces, los turrones reduros que te partían los dientes! Y... si se podía algún regalito aparecía debajo del arbolito. Hoy a la distancia y desde la óptica de mis viejos, pienso, cada vez que miraba a mi hija ver el reloj para que sean las doce y abrir su regalo, ellos me mirarían a mí, la cara de felicidad por un simple arbolito y un humilde regalito.